Antes del final del año pasado, en realidad pasada la mitad del año (octubre creo) tomé la decisión de estudiar el Profesorado de Música.
Yo ya vengo de intentar en un puñado de carreras y de no avanzar gran cosa en ellas, porque me costaba entender los términos, porque no llegaba con los tiempos a los parciales, y mi peor parte que era llegar en condiciones a los exámenes finales.
Comunicación Social, Historia, Bibliotecología, Lengua y Literatura y ahora Música.
Es la primera vez que decido encarar una carrera basada en la práctica principalmente.
No quiero ahondar en cómo fue mi circuito ente carreras como para haber terminado en música, pero si voy a decir que mi problema principal estuvo siempre relacionado con la falta de concentración, y con el tiempo se sumó el desgano y la fatiga para complicarme las cosas un poco más.
No puedo decir que existió algún indicio de que iba a terminar en esta carrera, porque en realidad esta carrera o lo relacionado al plano musical siempre lo esquivé. Para ser más sincero aún, nunca pensé en estudiar un profesorado de música, aunque si pensé en aprender algunos instrumentos y algo de canto.
2020 fue un año dónde hice algunos cursos para distraerme un poco, uno fue un curso de encuadernación, y otro fue un curso de Go, el tradicional juego asiático.
La verdad es que en algún momento le conté sobre estás prácticas a mi terapeuta, y tras indagar ella un poco en esos aspectos, notando que con la práctica me llevaba dentro de todo bien, fue ahí que me recomendó probar con carreras basadas principalmente en la práctica. La idea era averiguar entre las carreras de Música, Teatro y Artes Visuales, y al cabo de consultar entre algunas personas conocidas de dichos ambiente decidí inclinarme por música.
Este será todo un desafío, yo quería en algún momento de mi vida aprender algo de teoría musical, pues mi conocimiento es casi totalmente nulo, pues bien, ahora tengo una muy buena oportunidad.
Será cuestión de saber perseverar.
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